¡Hola!
Para contrarestar el Top Ten de la semana pasada, en el de esta semana os decimos qué cosas hacen que no queramos leer un libro, ya sea porque nos sature, no nos guste, etc.


1.- Histórica: mi enemistad con la historia viene de tiempo atrás así que, cuando leo que pasa en otro siglo o en otra época distinta a la nuestra, directamente la descarto. Tengo que reconocer que he leído novelas ambientadas años atrás y no he tenido malas experiencias. Aún así, soy muy reticente en ese aspecto. Muy mal, lo sé.
2.- Distopía: no me gusta pensar en "lo que podría pasar" en la sociedad, para bien o para mal. Así que huyo de ellas, al menos de momento. He hecho alguna excepción como por ejemplo Fahrenheit 451, que disfruté bastante.
3.- Fantasía: esto incluye ciencia-ficción también. Me gusta donde estoy y no tengo la necesidad de imaginar robots, coches de vuelan, naves espaciales súper molonguis y demás. La única fantasía que he leído es Harry Potter, pero eso ya es de otro planeta (nunca mejor dicho).
4.- Romántica: a nadie le amarga un dulce pero que el amor sea el principal protagonista cada día me cansa más y es que al final las historias siempre terminan siendo las mismas con otros personajes y escenarios. Si ya juntas romántica histórica dejo de leer sinopsis pero ya.
5.- Terror: en mi vida he visto muy pocas películas de este género así que ya no os cuento los libros que he leído de terror, donde allí está mucho más detallado y puedes imaginártelo como quieras. Soy muy miedosa y después las historias "me persiguen" así que intento estar lejos de ellas.


1.- Histórica: he leído alguna, y no todas me disgustan, aunque cuesta bastante que me haga con una novela de esta temática, porque la mayoría que he leído me aburren... no porque sean malas obras, sino porque creo que no son mi tipo.
2.- Terror: como mi compi, no consumo tampoco películas de terror, y leer sobre ellas tampoco termina de convencerme.
3.- Vampiros/otras criaturas oscuras deseando amor: el boom que hubo después de la publicación de Crepúsculo ya ha pasado, gracias a dios, pero no soporto las historias que acaban teniendo la misma sinopsis que la de Meyer. En su día me encantó esa saga, pero ya.
4.- Novelas que siguen el mismo patrón que un boom: siguiendo con el punto anterior, odio leer sinopsis que son calcos que un fenómeno anterior. Se ve demasiado el plumero, no solo de autores, sino también de editoriales.
Ya habéis visto que, aunque a priori nos tiren para atrás, no somos taxativas y estamos abiertas a nuevos géneros ya que nunca se sabe qué puedes encontrar.
¿Qué hace que no queráis leer un libro? ¿Coincidimos en alguno?
¡Hasta la próxima!