miércoles, 31 de octubre de 2012

No te escondas {Especial Halloween}

–Ven, pequeña, no te escondas de mí... Te trataré muy bien, ya lo verás. Anda, sal y vámonos; ya es la hora.
Esa siniestra voz le hablaba desde algún lugar de la casa, no sabía cuál, pero aun así era como si la tuviera en la nuca, la hacía temblar de la cabeza a los pies. Ella se mantuvo lo más quieta que pudo, intentando recordar los buenos momentos que había vivido con su familia, sus amigos... pero esos recuerdos eran tan lejanos que sólo veía imágenes que se difuminaban en un mar de tinieblas. Ahora sólo quedaba ella, y sabía que ella misma era su única esperanza. Y eso la aterraba, porque ese sería su final. Hasta ahí había llegado, no podía soportar más huidas, más presencias terroríficas, no podía soportar más aquella vida... 
–No te hagas de rogar, pequeña, sabes que tienes que venir conmigo. Ya hace demasiado tiempo que huyes de mí, y no deberías alargarlo más... Soy paciente, pequeña, pero todo tiene un límite.
No, no podía irse con él; no se iría con él. Las demás no lo habían hecho, y ella no mancharía su memoria ni su valentía. Dejó atrás el miedo y se levantó, saliendo de su escondite.
–Así me gusta, que seas buena chica.
Ver la cara de esa voz le daba todavía más escalofríos y, sobre todo, asco. La piel de ese ser era oscura, como si estuviera quemada, y no era posible fijar la mirada en sus ojos durante más de dos segundos de la maldad que transmitían.
–Pensaba que sería más difícil convencerte de lo que te convenía, pequeña.
–Pues ya ves lo fácil que ha sido.
Empezó a correr hacia la ventana y se lanzó de forma que la cabeza rompió el duro cristal. 
–¡No!
Su cuerpo ya sin vida cayó en el jardín del que algún día fue un hogar feliz. Un charco de sangre pronto se formó a su alrededor, tiñiendo su apagado pelo rubio y su blanca piel. Tenía algunos huesos rotos, pero ahora poco importaba.

El espeluznante espectador de la escena se mantuvo serio. Esa estúpida niña le había estropeado sus planes de futuro y se maldijo por haberla subestimado. Encontraría a otra, pero podían pasar semanas, meses o incluso años. Bajó tranquilamente por la escalera principal de la casa y salió al exterior.
–Es una lástima, pequeña, eras guapa.
Y se fue, calle abajo, hacia su próximo objetivo.



¡Feliz Halloween!

La verdad es que hoy no sabía qué hacer para celebrar este día, y la primera escena que he escrito me ha venido de repente a la cabeza, así que os he traído un pequeño relato.

Tened cuidado esta noche, porque nunca sabemos qué ser escalofriante se puede cruzar en nuestras vidas...

¡Un besito! ^3^

8 comentarios:

  1. Jopé con el relato, ¡qué miedo! El final es impactante, ea, zas. ¡Genial! :)

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    1. Pensé en escribir un final diferente al esperado jiji
      Un besito!

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  2. Madre mía!! Me ha encantado y horrorizado *-* Que relato más espeluznante, amo los relatos así.
    Un besito y que tengas un buen Halloween :)

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  3. ¡Un relato genial! Espero que pasaras una terroríiiifica noche... :[

    Besitos :)

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  4. ¡Joe, el final impresiona! Me ha gustado mucho :)
    Llego un poco tarde para desearte un feliz Halloween, pero espero que lo hayas disfrutado mucho si lo has celebrado de alguna manera ^^

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